“Malditos sean aquellos que con sus juramentos dicen defender a sus Hermanos, pero con sus acciones los traicionan”
Parte II
La llegada del General Manuel de Mier y Terán a Matamoros en 1828.
En comisión que recibió del General Guadalupe Victoria en una táctica para alejarlo de la ciudad de México debido a la popularidad de Mier y Terán entre los círculos Masónicos Escoceses, militares y sociales y además por antipatía personal, ya que Terán se burlaba de Victoria por el hecho de que éste se había cambiado su nombre real Fernández Félix, esto por su devoción a la Virgen de Guadalupe.

A pesar de que se le había retirado del Ministerio de Guerra y Marina y la Dirección del Colegio de Artillería, no protestó y obedeció la Comisión encomendada la cual era reconocer la frontera entre México y Estados Unido, la cual tomó un carácter científica, geográfica y botánica ya que se corría el grave riesgo de de que hubiera una insurrección de anglosajones por que cruzaban de manera ilegal para establecerse y, además de introducir esclavos afroamericanos, violando francamente las leyes mexicanas que prohibían expresamente la esclavitud (tristemente el tiempo y la historia le darían la razón).

Esto en el año de 1828, y fue acompañado por los siguientes personajes también iniciados en la Orden; el Coronel Constantino de Tárnava antiguo insurgente que acompañó a Javier Mina en su expedición en 1817 además de dar la cátedra de Cálculo Infinitesimal en la Escuela de Cadetes, Teniente de Estado Mayor José Bartrés, Rafael Chovell, Ingeniero en Minas, Teniente de Artillería y dibujante José María Sánchez y el sabio físico, botánico, zootécnico y cartógrafo franco-suizo Jean-Louis Berlandier que llegó a ser Director del Museo en Ginebra.

No habiendo terminando su tarea, recibe órdenes urgentes de que la patria estaba siendo invadida por el Brigadier español Isidro Barradas que había desembarcado en Tampico con el objeto de reconquistar México, el 15 de agosto de 1829 llega a Altamira y hace todos los preparativos para atrapar a Barradas, en esta ocasión las armas nacionales se cubrieron de gloria y Mier y Terán nos da el siguiente parte de guerra:
“En medio de tan grandes calamidades de 2,000 hombres que componen la División de Tamaulipas ninguno se ha hecho acreedor a la menor reprensión, no ha habido ninguna deserción desde que se realizó el estrecho bloqueo”.
A Santa Anna no le quedo más remedio que aceptar los honores de Mier y Terán y compartió con él los premios dignos que recibieron ante el Presidente Vicente Guerrero. Con la apertura del puerto en la Boca del río Bravo llegaron muchos extranjeros que pasaron a engrosar las filas de la Logia ‘Valor’ No. 53.


Lamentablemente no han sobrevivido documentos que nos arrojen más luz acerca de las logias masónicas que surgieron después de ‘Valor’ No. 53, no obstante si conocemos a integrantes destacados de la orden masónica en nuestra ciudad como son:
-Coronel José Antonio Mejía, capturó Matamoros el 29 de junio de 1832, Rito Yorkino
-Mariano Paredes y Arrillaga, Escocés, construyo el Fortín ‘Paredes’ en donde hoy se encuentra la Aduana Fronteriza en la Calle Galeana.

-Macedonio Capistrán, Alcalde 2º en 1835 y en 1851, descendiente de los Capistrán que llegaron al sur de San Juan de los Esteros en 1789 al Rancho ‘El Sacramento’ lucho en la guerra contra EUA a manera de guerrillero en la zona de Cruillas, Burgos y San Fernando, intentó desalojar a los americanos de San Fernando en 1847, cuando éstos capturaron dicha plaza con 150 hombres pero los mismos se retiraron antes de que el llegara y artífice de la defensa que le dio a Matamoros su 3 títulos: ‘Leal, Invicta y Heroica’.


-General José Urrea, Rito Escocés, inició las ofensivas en contra de los Texanos en esta ciudad en 1846.
-Victorino T. Canales, del Rito Escocés, Alcalde en 1842 y Gobernador interino del Estado en 1845.
-General José María Carvajal, líder federalista, insurrecto en el ‘Plan de la Loba’ y combatió en la 2da Intervención Francesa.

-Nicolás Bravo, fue Comandante Militar de la Línea del Bravo en 1837 para dirigir las operaciones contra los rebeldes texanos.

-Vicente Filisola, del Rito Yorkino, Comandante Militar de esta zona.

No sería si no hasta el año de 1860 en que el Lic. Vicente L. Castro hizo la petición al Soberano Gran Comendador, Venerable Hermano Ignacio Comonfort, refugiado en aquel entonces en Brownsville, Texas y que a pesar todas las guerras intestinas, extranjeras y demás peripecias de nuestra historia en las que desgraciadamente y por el antiguo carácter clandestino y secreto de la orden masónica hicieron que muchos de estos documentos se perdieran; lástima, hubieran podido hacer mucho mas rica aun la historia de la masonería en nuestra ciudad, el cual fundó la Logia ‘Tamaulipas’ No. 2, la Carta Patente se expediría en fecha de 21 de octubre de 1861, no obstante el Licenciado Castro moriría en 1864 y su restos descansan en el cementerio masónico de la ciudad de Brownsville.
Los integrantes de ‘Tamaulipas’ No. 2 fueron…
Continuará…
“Si tenéis algo que decidme, hablad de frente y se os atenderá, no os escudéis en la tinta y el papel”